Agradeciendo la presencia de todos los asistentes: profesionales de la comunicación; periodistas, comunicadores audiovisuales, y comunicadores radiales; escritores independientes, estudiantes y deportistas. Y muy especialmente a nuestros panelistas: Carlos Carvajal Barahona, profesor, escritor y destacado maratonista internacional chileno, autor de ‘Gulutreng: crónica, mito y leyendas de Peumo’ y ‘Historia del Ñidol Lonko Leviantú, y de la nación Pewenche de Villucura’; Roberto Rabi González, abogado y escritor deportivo, autor de ‘Relatos azules, algo más que fútbol’ y ‘Una forma de vida’; José Antonio Lizana Arce, escritor y periodista deportivo, autor de ‘Ceacheí: palabra de campeón’ y ‘Pisando la pelota’ entre otros; y Carlos González Lucay periodista y escritor deportivo, autor de ‘A discreción, viaje al corazón del fútbol chileno bajo la dictadura militar’ y ‘La roja, historias de la copa américa’. De la cordial discusión surgida entre todos los presentes, se origina esta síntesis del encuentro.
Ser riguroso en la labor periodística, en el reporteo, en la investigación, promover el trabajo ‘on the record’, como el que sustenta una historia creíble en contraposición al ‘off the record’, que da espacio a la especulación pero ‘que golpea’; todas cuestiones que parecen no alinearse con el principio de maximización de las utilidades.
Mesa 1: La profesión del cronista deportivo
“Los primeros cronistas deportivos fueron los poetas”
En nuestro país el cronismo deportivo vivió su época de esplendor con la revista Estadio, recordada por una lírica capaz de capturar mantener cautiva la atención e imaginación del lector deportivo. Hoy, la batalla periodística parece centrada en “dar el golpe”, entregar un dato que impacte en el público. Y si la prensa matutina o luego la televisión supusieron acelerar la velocidad de noticias, los medios digitales impusieron la inmediatez, el segundo es imperdonable. Además, pareciera que en el moderno periodismo deportivo se libra una lucha de egos en que el periodista desarrolla una imagen pública que se antepone a lo informado, rompiendo uno de los ideales formativos de la profesión en que se destaca “el periodista no es noticia”.
Ahora, visto desde la necesidad de dar cobertura y difundir la actividad deportiva, no puede despreciarse el impacto que genera la cobertura deportiva aun cuando puedan cuestionarse su calidad o concentración temática. Existe una cadena de sucesos en diferentes niveles: público, autoridades, auspicios, etc., todo surgido desde una noticia deportiva que aunque no es todo lo perfecta que nos gustaría, es y da vida al deporte. Tampoco podemos exigir que el periodista deportivo sea un experto en todos los deportes, algo imposible de llevar la práctica; más si consideramos que en muchas ocasiones el periodista debe trabajar apurado por el cierre editorial, situación del todo contraria a la aspiración de calidad, investigación, y detalle en los contenidos.
Pero esta es una batalla que debemos estar dispuestos a dar: lograr un contenido de mayor calidad. Ser riguroso en la labor periodística, en el reporteo, en la investigación, promover el trabajo ‘on the record’, como el que sustenta una historia creíble en contraposición al ‘off the record’, que da espacio a la especulación pero que golpea; todas cuestiones que parecen no alinearse con el principio de maximización de las utilidades.
La oportunidad de elevar el estándar del cronista deportivo supone replantear la crónica hacía la historia más allá de la noticia, hacía las personas, generando un relato que apele a la pasión deportiva del lector por sobre lo técnico. Los primeros cronistas deportivos fueron los poetas, cuyo conocimiento no era técnico sino que lírico, ellos creaban un relato para contar y ensalzar lo sucedido en el campo de juego. Así se ha capturado a la audiencia deportiva, alimentado la íntima pasión que el deporte, y tal vez sólo el deporte, es capaz de generar.
Sobrevivir a la lógica comercial imperante en los medios de comunicación, prensa, radio, televisión u editoriales, es por decirlo menos un trabajo arduo. Publicar bajo un estándar ideal tiene costos, y entre quienes toman la decisión de ‘que publicar’ opera una simple máxima de mercado: ‘hay que vender’; y si no vende no se publica. Desde este diagnóstico la línea editorial independiente se plantea como un bastión en donde aún es posible llegar más allá del resultado deportivo para apreciar el valor que el deporte tiene en nuestra cultura.
Asumiendo que más likes no indican calidad en nuestros contenidos, los medios digitales pueden ser un buen punto de partida para formar un nicho de contenido deportivo sobre las temáticas que han sido desplazadas fuera los medios tradicionales.
Mesa 2: El desafío por descentralizar el relato deportivo
“La popularidad no es garantía de un contenido de calidad”
Hace tiempo ya que el fútbol no se trata sólo como un deporte, es más bien un espectáculo deportivo. De similar manera sucede en otros eventos de participación masiva como las grandes corridas running. ¿Podemos hablar de deporte cuando lo que se organiza, lo que se planifica, y lo que se desarrolla es principalmente un gran evento publicitario?
La popularidad no puede considerarse como garantía de calidad en el contenido deportivo. El concepto dominante para describir a los medios es que estos se han farandulizado, y este efecto se hace extensivo al espacio que el deporte ocupa en ellos. El cronista deportivo debe saber utilizar y adaptarse a las oportunidades que ofrece el mundo digital, en las nuevas tecnologías confluyen dentro de un solo mensaje: el texto, el audio y la imagen, todo es un aporte a incorporar en la tarea de embellecer la noticia o crónica deportiva. Asumiendo que más likes no indican calidad en nuestros contenidos, los medios digitales pueden ser un buen punto de partida para formar un nicho de contenido deportivo sobre las temáticas que han sido desplazadas fuera los medios tradicionales; y un nicho más específico puede ser atractivo para generar auspicios sobre un público más específico, un nicho de mercado.
Es en primera que persona que debemos gestar el camino hacía un mejor estándar deportivo, generar una responsabilidad social deportiva entre todos quienes estamos vinculados al deporte es asumir nuestra responsabilidad. Somos nosotros los llamados a posicionar política y socialmente nuestra actividad, como deportistas, entrenadores, dirigentes, gestores, académicos, como profesionales en cada una de nuestras áreas; como cronistas desde nuestros relatos e historias.
El desafío por diversificar voces y contenidos es también el desafío por entregar un contenido de calidad en los medios que son accesibles para el público deportivo. Por encima de las pautas y el contenido probado, sólo el público puede decirnos si podemos o no ser leídos (consumidos), nuestra apuesta debe ser por la calidad, pasión y creatividad en la forma de entregar nuestros contenidos. Esta es nuestra mayor tarea como cronistas deportivos: ser capaces de generar un contenido diverso que capture la atención del público deportivo, nuestro público.
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"Encuentro de Cronistas Deportivos: Desafíos comunes de la profesión", Miércoles 11 de Noviembre del año 2015, Santiago. Versión original en PDF: Síntesis Encuentro de Cronistas Deportivos.
Convoca: ODEP. Organizan: Colectivo de Escritores Deportivos Independientes, Revista Chilena de Atletismo. Patrocina: Comité Olímpico de Chile, Universidad de Los Lagos - Campus Santiago.